Page 124 - LA PIEDRA FILOSOFAL.pdf
P. 124
El Iniciado, cuando recibe la Iniciación de Malchut, incuestionablemente rompe el Primer Sello; cuando pasa por la de Jesod, rompe el Segundo Sello del Libro Sagrado que es el hombre; cuando pasa por la Tercera Iniciación, rompe el Tercer Sello; cuando pasa por la Cuarta, rompe el Cuarto Sello; cuando pasa por la Quinta, rompe el Quinto Sello; cuando pasa por la Sexta, rompe el Sexto Sello, y se ha consumado la Obra, porque el Séptimo es de descanso, de oración, de meditación, de súplicas como se ve allí en el Apocalipsis de San Juan.
Es claro que al romperse el Séptimo Sello, la Obra está ya consumada. El Octavo Día es siempre para resucitar.
Uno tiene que vivir el Génesis en lo individual o en lo colectivo. Lo vive en lo colectivo con la creación del Universo, como partícula divina que viene a esta creación.
Ahora, el Apocalipsis, uno tiene que vivirlo individualmente o lo vive colectivamente. Colectivamente es el Libro de la Vida, el Libro de la Sabiduría. A través de la historia se va rompiendo cada sello. Por estos tiempos está ya para romperse, por lo menos el sexto sello, el penúltimo. Es decir, la humanidad está viviendo el Apocalipsis colectivamente.
Si el Alquimista tiene que hacer Oro, no solamente crear los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, sino que además tiene que convertir esos cuerpos en Oro Puro, antes de que puedan ser tragados por la Serpiente, así también el Logos tiene una Edad de Oro; y para poder tener el Logos una Edad de Oro, tiene que hacer lo mismo que hace el Alquimista en su laboratorio, arrancando sello por sello.
El Logos tiene que hacerlo vivir a la humanidad en toda la naturaleza, debe ir arrancando cada sello.
Claro que cuando termina o se rompe ya el sexto sello, la Obra queda prácticamente terminada, viene la catástrofe final.
Con la ruptura del séptimo sello, ya no queda nada de todo lo que había.
Por último viene la resurrección del Logos en todo lo creado, en toda la naturaleza; es cuando es la Nueva Edad, la Edad de Oro.
Así como el Hombre para poder hacer Oro, hablando en sentido Alquimista, necesita romper los Siete Sellos, así también el Logos para poder hacer una Edad de Oro, necesita que toda la humanidad rompa los siete sellos, que toda la naturaleza los rompa, y entonces se hace la Edad de Oro; pero tiene que todo esto pasar por un Apocalipsis tremendo y espantoso.
De manera que, o vivimos el Apocalipsis individualmente, o nos toca vivirlo colectivamente. Mejor vivirlo individualmente, que nos da el triunfo, y fijamos el Oro en nosotros mismos, y logramos nosotros conseguir, pues, el Vellocino de Oro de los Antiguos, o nos toca vivirlo colectivamente con el gran Apocalipsis Mundial, a los mundos infiernos, a pasar por la Muerte Segunda para tener el derecho más tarde de vivir en la Edad de Oro como esencias puras de una nueva humanidad. Pero, de todas
125