Elías,
Helías, Eliyah, Eliyahu, es el Nombre del Profeta
Elías.
Moisés, Moshé, Mosheh, es el Nombre
del Profeta Moisés.
Estos Dos Profetas siempre han
trabajado juntos en todas las épocas. Unas veces el
Profeta Elías viene como el Maestro del Bodhisattwa
del Profeta Moisés; otras veces el Profeta Moisés
viene como el Maestro del Bodhisattwa del Profeta
Elías.
En la época del Éxodo el Profeta
Moisés fue el Maestro del Bodhisattwa del Profeta
Elías que estaba Reencarnado en Phineés o Pinjas,
Hijo de Eleazar, Hijo de Aharón.
En la época en la cual se le
conoció como el Profeta Elías fue el Maestro del
Bodhisattwa del Profeta Moisés Reencarnado en el
Profeta Eliseo.
En la época de Isaac Luria (que fue
una Reencarnación del Profeta Moisés), vino como
Maestro del Bodhisattwa del Profeta Elías,
Reencarnado en Su Discípulo Hayyim Vital. En esa
época, Isaac Luria escribió muy poco; en cambio
Hayyim Vital escribió en varios volúmenes todas las
enseñanzas de Isaac Luria.
En este final de los tiempos, el
Profeta Elías vino como el Maestro del Bodhisattwa
del Profeta Moisés.
Sobre las Almas de Moisés y de
Elías de acuerdo a las enseñanzas de Isaac Luria:
Isaac Luria enseña que el Profeta
Elías, tomó el "Ruach de Atziluth de Adam
HaRishon", convirtiéndose en un Ángel
Celestial, el Ángel Sandalphon. Y que "una
porción de la Neshamah de Atziluth fue recibida
por Henoch...", llegando a ser también un
Ángel Celestial, el Ángel Metratón. Más tarde, José
el Hijo de Jacob "recibió la Neshamah de
Henoch..." Más tarde, "la Neshamah de
Henoch también Reencarnó en Yishmael el hijo de
Elisha..."
Pinjas el hijo de Eleazar, el Hijo
de Aharón, Reencarnó en él varias Almas. Cuando
Pinjas nació dos Centellas Almas se incorporaron en
Él: una proveniente de la Raíz de José el Justo, y
otra Centella de Alma de parte de Jetró. Estas Dos
Almas son llamadas "Pinjas". Y en Pinjas, se
incorporaron también otras Dos Almas: las Almas de
Nadav y Avihu. Y también el Alma de "Eliyahu el
Tishbita". Más otra Alma adicional llamada "Eliyahu"
de la Tribu de Benjamín.
Estas Almas integran cuatro
niveles:
El Alma con la cual Pinjas nació,
que es la combinación de Dos Centellas de Almas: de
José el Justo y de Jetró.
El segundo nivel son las Centellas
de Almas de Nadav y Avihú.
El tercero de Eliyahu el Tishbita.
El Cuarto de Eliyahu de la Tribu de Benjamin.
Más tarde una parte del Profeta
Elías se Reencarnó en el Rey Ezequías.
Más tarde se Reencarnó en Matatyahú
el Alto Sacerdote Hasmoneo y el Rey.
Más tarde, en "Rabbí Yohanan
ben Zakkai".
Más tarde en Akiva Hijo de José
(Rabbí Akiva).
Después de Reencarnarse
continuamente, se Reencarnó en Hayyim Vital.
Lo anterior es de acuerdo a las
enseñanzas de Isaac Luria.
En las tradiciones Cristianas, el
Profeta Elías estuvo Reencarnado en Juan el
Bautista. Y mucho más tarde en Joaquín de Fiore, el
Maestro del Hermano Francisco de Asís.
Cada vez que se Reencarnó el Alma
del Profeta Elías, también se Reencarnó el Alma del
Profeta Moisés.
Isaac Luria fue una Reencarnación
del Alma del Profeta Moisés.
Ambas Almas, la del Profeta Elías y
la del Profeta Moisés, está escrito y anunciado en
textos Proféticos, que estarían Reencarnadas en el
final de los tiempos.
Sobre la venida de los Profetas
Elías y Moisés o Henoch en el final de los tiempos
varias Profecías la han anunciado.
En "Deuteronomio
Rabba", 3:17, se habla de la venida de Elías y
Moisés "en el mundo futuro":
"YHVH
añadió: Moisés, Yo te juro: como
tú entregaste tu vida en servicio de ellos en este
mundo, así también en el mundo futuro, cuando Yo
haga venir a ellos el profeta Elías, los
dos vendréis conjuntamente."
En una de las
Cartas que nos escribió nuestro Venerable y Amado
Maestro Rabolú, nos dice:
"... eso está
muy claro, que somos compañeros muy
antiguos y que estamos escalando otra
vez las posesiones que poseíamos en aquella
época..." (Carta 1693 del 14 de diciembre
de 1995).
"En aquella época"
fue la época del antiguo Egipto.
Los Profetas Elías
y Moisés siempre han trabajado "conjuntamente",
porque son "compañeros muy antiguos". Y en esta
Reencarnación, escalamos nuevamente para lograr las
posesiones esotéricas o espirituales que "poseíamos
en aquella época" del antiguo Egipto.
El Kabalista y
Abad Eliphas Levy, se refiere a uno de estos
significados, donde dice:
"Moisés ha de volver
junto a Elías cuando se consuma el
misterio de la transfiguración de Jesucristo."
"En el
Apocalipsis de San Juan se trata de LOS DOS
TESTIGOS O MÁRTIRES, a los cuales la Tradición
Profética da los Nombres de ELÍAS Y
HENOCH: ELÍAS, el Hombre de la Fe, del
Celo, y del Milagro; ENOCH (...) El Padre de la
Kábala..., dicen las Santas Alegorías que no murió
como los otros hombres, mas que fue arrebatado al
Cielo para regresar al fin de los tiempos... Esta
Resurrección de (...) ENOCH, esperada en el fin de
los siglos de ignorancia, será la renovación de su
Doctrina por la inteligencia de las Llaves
Kabalísticas que abren el Templo de la Unidad y de
la Filosofía Universal, por mucho tiempo oculta y
reservada solamente a los Elegidos que el mundo
hacía morir." (Eliphas Lévi.)
En relación a la interpretación
anterior, nos dice nuestro Venerable y Amado Maestro
Samael Aun Weor:
"La
Transfiguración interpreta con suma inteligencia
la Ley de Moisés, enseñando a
las gentes y desplegando en su trabajo todo el
celo maravilloso de un Elías."
En este final de los tiempos, el
Profeta Elías ya vino en nuestro Venerable y Amado
Maestro Rabolú; y "conjuntamente" con Él, el Profeta
Moisés que realiza "su trabajo" con "todo el celo
maravilloso de un Elías." No que Moisés sea Elías,
sino que actúa con todo el celo de un Elías.
Isaac Luria explicó a su Discípulo
Hayyim Vital, que "en la última generación" estará
reencarnado Moisés:
"Porque, en el
futuro Mosheh (Moisés) mismo se
reencarnará y vendrá en la última generación,..."
Teniendo en cuenta
la época en la que vivió Isaac Luria (Siglo XVI),
esta profecía, interpretando su cumplimiento "en la
última generación", se refiere, a esta "generación"
de este final de los tiempos.
En el Targum a
Éxodo, "Sección Vaera", está escrito que "Phineas"
es Elías ("Elijah"), "el Gran Sacerdote", y vendrá
"al fin de los días".
En el "Apoc.
Bar. XXVII. 15, XXIX. 8, el tiempo Mesiánico
es denotado por la frase "la consumación de los
tiempos."
En el "Apocalipsis
de Elías", Enoch y Elías son identificados
como los "dos testigos" del Apocalipsis.
En uno de los
Textos del Zóhar está escrito que el Profeta Elías
se revelará "Antes de la llegada de la era
mesiánica":
"Tú,
Eliahu, (Elías el Profeta)
Precederás a la profecía en la generación
Antes de la llegada de la era mesiánica…
Te revelarás a algunos cara a cara,
A otros te revelarás escondido por el ojo del
intelecto, Y a otros te revelarás a través de su
sabiduría." (Tikunei Zohar Jadash).
De acuerdo a estos textos, Su
revelación de parte de Él, no es pública, no habla
"de estas cosas públicamente." A algunos "cara a
cara", a otros "escondido", y a otros "a través de
su sabiduría".
En uno de los diálogos personales,
íntimos, particulares, que tuvimos con nuestro
Venerable y Amado Maestro Rabolú, en el año de 1996,
le dije:
"Maestro, Usted
en el Astral me dijo que Su Real Ser es el Profeta
Elías..."
Y el Maestro me respondió:
"Sí, así es, el
Nombre de Mi Real Ser es el del Profeta Elías,
pero no hablo de estas cosas públicamente..."
Varias veces nos confirmó el
Maestro aquí en este Mundo Físico, Verbalmente,
Personalmente, esta Verdad, la cual ya nos había
anunciado en los Mundos Internos Superiores, en el
Mundo Astral...
El Maestro nos dijo en varias
ocasiones que todo Maestro tiene Dos Nombres: El
Nombre del Íntimo que es el Ser, y el Nombre del
Real Ser. Nos confirmó que el Nombre de Su Íntimo es
el Maestro Rabolú y que el Nombre de Su Real Ser
(Logoico) es el del Profeta Elías.
Le dije al Maestro que en Los Mundos Internos, en el
Mundo Astral mi Padre Interno me entregó un enorme y
antiquísimo Libro, con Letras de Oro en su tapa o
portada, cuyo título es "El Árbol Genealógico
de la Sabiduría"... Abrí el gran Libro, y ví
que al inicio estaban los Nombres Sagrados de los
Primeros Maestros, Iniciados o Jerarquías que han
venido desde el Inicio de la Humanidad en la Tierra,
a Guiar, a Ayudar y a Enseñar a la Humanidad... A
medida que iba leyendo el Libro en cada una de sus
páginas, aparecían ante mis ojos, los Nombres y la
Historia de todos los Grandes Maestros y Salvadores,
que han venido a la Tierra: Sus constantes
Reencarnaciones, sus muchos y muy variados
Nombres... Las continuas Reencarnaciones de "Los Dos
Testigos", encontrándose siempre juntos... Ya, Uno
como Maestro y Otro como Discípulo... Ya , Uno como
Discípulo y Otro como Maestro... pero siempre como "compañeros
de trabajo desde tiempo atrás...", como "compañeros
muy antiguos... que estamos escalando otra vez las
posesiones que poseíamos en aquella época..." (Carta 1693 de 1995), para
decirlo con las propias Palabras de nuestro
Venerable y Amado Maestro Rabolú que nos escribió en
las Cartas que nos envió cuando estábamos en misión
en el Brasil.
Al llegar a la última página del Gran Libro, ví
exactamente al final, Dos Nombres:
"¡Elías y
Moisés!"...
Muy emocionado le dije a mi Padre
Interior:
"¡Padre, Padre,
mira, los dos últimos Nombres que están aquí en el
Libro son los Nombres de los Dos Profetas Elías y
Moisés!"...
Y mi Padre, sonriendo complacido me
dijo:
"¡Sí Hijo mío,
así es!"...
Al terminar de relatarle lo
anterior a nuestro Venerable y Amado Maestro Rabolú,
en aquella reunión en la cual estábamos el Maestro,
mi persona y mi Esposa, el Maestro nos dijo:
"Son dos
Maestros que están cumpliendo Misión: su Padre
[Moisés] y el Mío [Elías]..."
Damos Fe, ante Dios y ante la
Humanidad, ante el Cielo y la Tierra, de que estos
testimonios son Verdaderos.
Algunos años después, y sin tener
ninguna información de lo que estaba sucediendo por
esos días del mes de Diciembre del año de 1999,
queríamos con urgencia, regresarnos a volver a
trabajar y a vivir en la Ciudad de Bogotá; y al
tratar de llegar a un acuerdo con los que nos
estaban arrendando o alquilando la casa donde
estábamos, les dijimos, que nos teníamos que
regresar para Bogotá, porque allá teníamos un
Familiar muy querido que estaba Gravemente Enfermo y
con peligros de morir...
Aunque no sabíamos absolutamente
nada de la situación de Salud del Bodhisattwa de
nuestro Venerable y Amado Maestro Rabolú, cuando
dijimos eso, nos estábamos refiriendo era a Él...,
lo cual, resultó cierto... No mentimos, si bien no
sabíamos nada, pero lo que nos hizo hablar así, fue
seguramente la Intuición...
Por aquellos días vimos una noticia
publicada por la televisión, sobre un Misterioso
Objeto Brillante que se vio en el cielo sobre la
Ciudad de Bogotá... Recuerdo que le dije a mi
Esposa, a nuestro Hijo y a su Esposa que esa Luz era
una Señal que anunciaba algo relacionado
directamente con nuestro Venerable y Amado Maestro
Rabolú...
La noticia hablaba de un extraño
cuerpo celeste visto el Viernes 17 de Diciembre del
Año 1999, sobre la ciudad de Bogotá. Se informó que
unos científicos irían a examinar el vídeo de una
filmación de un objeto "demasiado brillante, de más
de 100 metros de largo, que generaba su propia
luz"... Algunos científicos de Colombia estaban
asombrados, pues según se informó "no era un avión,
ni un cometa ni ningún otro cuerpo celeste conocido
por los astrónomos"... pues no habían visto antes
"un caso tan espectacular como éste"... Este
misterioso objeto brillante "se desplazaba a gran
velocidad, a una altura de 3.500 pies", y sin
embargo, "no fue visto por los pilotos de aeronaves
comerciales ni captado por el radar de (el
Aeropuerto) El Dorado"...
Después de algunas semanas,
recibimos la noticia de que nuestro Venerable y
Amado Maestro Rabolú había Desencarnado, el día
Sábado, "8 de Enero del año 2000"...
No puedo describir aquí el Dolor
tan terrible y la Desolación tan espantosa que
sentimos...
Volví a sentir una angustia tan
grande, como cuando Desencarnó nuestro Venerable y
Amado Maestro Samael Aun Weor.
El llanto, la amargura, los
remordimientos, han sido y siguen siendo muy
amargos...
Se nos fue físicamente, y alzó Su
Vuelo, como las "Águilas Rebeldes", para Colgar Su
Nido "en las rubias pestañas de los Astros..."
Necesitamos ahora remontar nuestro
Vuelo y encontrarlo donde nos espera con ansias, con
Infinito Amor, para darnos Su Mano, Sus Enseñanzas,
Su Perdón, y Ayudarnos con Su Fuerza, Valor, Fe y
Protección, para seguir en el Movimiento Gnóstico de
las Dimensiones Superiores de la Naturaleza y del
Cosmos... ¡Aunque en realidad es como si no hubiera
desencarnado, pues siento Su Viva Presencia ahora
con más Fuerza, y mucho más Poderosa que antes!...
Vuelvo a transcribir aquí aquellas
palabras que el Maestro nos dijo a finales del mes
de Octubre de 1996, cuando le dijimos que le
agradecíamos por toda la ayuda que nos estaba dando:
¡Y con mucho
gusto se las seguiré dando, porque ahora necesitan
mucha Fuerza, porque es muy duro El Camino y
necesitan que los Ayude mucho con la Fuerza que se
las seguiré dando. Síganle dando duro a la Muerte
y al Desdoblamiento Astral, para que puedan ir a
cualquier Templo y conversar así como estamos
conversando ahora, con cualquier Jerarquía!
Debo decir, que varias veces lo he
encontrado, y hemos sido Perdonados... Y puedo dar
Testimonio de que nuestro Venerable y Amado Maestro
Rabolú, continúa Ayudándonos, como en muchas
ocasiones por escrito y verbalmente nos lo
prometió...
Aquel "misterioso objeto
brillante", nos trae la imagen del Carro de Luz, que
arrebató al Profeta Elías en un Torbellino de
Fuego...
Algún tiempo después, encarné al
Cristo Interior, en el Cuerpo Causal de Oro, en el
mes de Septiembre del año 2000. Desde entonces fue
creciendo hasta llegar a la "Edad Madura", para
vivir la Pasión por el Señor, y el Drama del
Calvario, en mi Alma, en mi corazón. Mas mi persona
física, sombra pecadora, no tiene ningún valor. Soy
tan solamente Su imperfecto instrumento por medio
del cual ÉL está realizando la Gran Obra del Padre.
Soy, asimismo, el discípulo y fiel servidor de
nuestro Señor Jesús El Cristo, de nuestro Amado Gurú
el V.M. Moria, de nuestro Venerable y Amado Maestro
Samael Aun Weor y de nuestro Venerable y Amado
Maestro Rabolú. Y de Sus enseñanzas damos
testimonio.
El Kabalista Francés, el Abad Eliphas Levy,
refiriéndose a "la llegada de la era mesiánica",
escribió en "Claves Mayores y Clavícula de Salomón"
en 1860:
"Enoch
aparecerá en el año dos mil de la era
cristiana. [*] Luego el Mesianismo, del
cual tiene que ser el precursor, florecerá sobre
la tierra durante mil años. Estas previsiones son
el resultado de todas las profecías y de todos los
cálculos qabbalísticos..."
[*] (Ver por
favor nuestro estudio "Elul
5760", en formato Pdf para descargar.)
Nuestro
Señor Jesús El Cristo (el Mesías o Ungido) es el
Mesías Supremo, EL CRISTO, El Hijo del Hombre por
Excelencia, El Hijo De Dios, El Hijo Unigénito del
Padre Celestial Absoluto, que se Encarnó hace unos
dos mil años, para La Salvación del Mundo, de toda
la Humanidad, y es El Cristo Vivo, que Vive con su
mismo Cuerpo Resurrecto e Inmortal con el que
Resucitó al Tercer Día de entre los Muertos. Él es
el Profeta "igual que" Dios prometido por Él a
Moisés, como está escrito en Deuteronomio 18:15; y
que es diferente al Profeta prometido por Dios a
Moisés "igual que" Moisés del Deuteronomio 18:18.
Los "Tres Mesías" son Sus enviados y humildes
servidores en la Obra del Padre.
"Mesías" o "Ungido" significa
"Cristo", el Cristo Íntimo, Interior, que debemos de
buscarlo, encarnarlo y seguirlo dentro de cada uno
de nosotros.
Como quiera que nuestro Venerable y
Amado Maestro Samael Aun Weor (el Verbo de Dios),
nuestro Venerable y Amado Maestro Rabolú (el Profeta
Elías) y el Venerable Maestro Thoth-Moisés, han
encarnado al Cristo Íntimo, son Tres "Mesías" o "Ungidos", que
al venir a cumplir una Misión pública, en sucesivo
orden y en una misma época, al cumplirse la llegada
del Tercero, y explicarse con las profecías, su
venida como Tres Mesías, estas revelaciones son
llamadas "Mesianismo", y "era Mesiánica".
Hemos escrito en otros lugares
sobre Los Tres Mesías y el Mesías
Celeste anunciados en los Textos Esenios
hallados en las cuevas de los alrededores de Qumrán,
a orillas del "Mar Muerto": El Mesías Rey Sacerdote
Guerrero, el Mesías Rey Gobernante, el Mesías Rey
Profeta, y el Mesías Celeste o Melkizedek.
El Primer Mesías Rey y Sacerdote
Guerrero, se refiere, no al sentido del término
"guerrero" meramente literal. sino a Su Misión
Espiritual como el "Quinto Ángel del Apocalipsis":
nuestro Venerable y Amado Maestro SAMAEL Aun Weor.
"Samael...
(es)... el más sabio y el más espiritual de todos
los Espíritus..." (H.P. Blavatsky, "La Doctrina
Secreta").
En el "Testamento de Leví"
(capítulo 8), es Ungido con "tres porciones", siendo
la segunda como "Sacerdote", y en la tercera recibe
"un nombre nuevo, porque surgirá de Judá como Rey".
Más adelante en el capítulo 18, es identificado con
la función del Quinto Ángel, donde dice que "Él
atará a Beliar", o "Belial", como está escrito en el
capítulo 20 del Apocalipsis. Si tenemos en cuenta,
también, que nuestro Venerable y Amado Maestro
Samael Aun Weor se ha revelado con las siguientes
Palabras: "... He aquí el león de la tribu de Judá
(el Verbo iniciador de la Nueva Era Acuaria),...",
como consta en "El Mensaje de Acuario", "Capítulo
XV", "El Libro Sellado", tenemos aquí una clave que
lo identifica con el Primero de los Tres Mesías
anunciados en los Textos Esenios de Qumrán.
Mas también nuestro Venerable y
Amado Maestro Samael Aun Weor es Sacerdote según el
Orden de Melkizedek. Porque todo Maestro
Cristificado es Ungido Espiritualmente como
Sacerdote del Orden de Melkizedek.
En una interpretación de la
Profecía de Jacob de Génesis 49:10, en El Zóhar, el
Primer Mesías es llamado "el Mesías de la Casa de
Judáh", el Segundo Mesías el "Mesías de la Casa de
José", y el Tercer Mesías "Shilóh":
"El cetro no
partirá de Judá
ni el báculo del gobernante de entre sus pies";
"el cetro" se refiere al Mesías de la casa
de Judá,
y "el báculo", al Mesías de la casa de
José. "Hasta que viene Shilóh":
este es Moisés, siendo el valor
numérico de los nombre Shilóh y Moisés el mismo."
(El Zóhar).
Estos Tres Mesías trabajan
humildemente bajo las Órdenes Superiores de nuestro
Señor Jesús El Cristo, y en la Espiritual Orden de
Melkizedek, y son Sus enviados en este final de los
tiempos.
Estas funciones, identifican
claramente a nuestro Venerable y Amado Maestro
Samael Aun Weor, con el Primer "Rey Mesías Sacerdote
Guerrero" de los Textos de Qumrán.
El Segundo Mesías es llamado el
"Mesías Rey Gobernante", con funciones como las de
un Nuevo Rey David, que se han correspondido con
estas funciones en la Obra y Misión de nuestro
Venerable y Amado Maestro Rabolú o el Profeta Elías
Reencarnado, que en otras Reencarnaciones -de acuerdo a las explicaciones
de Isaac Luria-, el Profeta Elías Reencarnó en el
Rey de Judáh Ezequías. Y más tarde en "Mattisyahu"
o "Matatyahu", el Sumo Sacerdote Hasmoneo, en una
época muy próxima a Su Reencarnación en Juan El
Bautista.
El Tercer Mesías es llamado el
"Mesías Rey Profeta", claramente identificado con
Shilóh o Moisés, y con el "Maestro de Justicia" en
el final de los tiempos.
Todo se refiere a la Parte
Espiritual, a la Realeza del Real Ser. Pues la parte
física o personal, es solamente un instrumento, un
guía, un orientador de la parte Espiritual.
Insistimos en la
necesidad de comprender que en este final de los
tiempos, el "Mesías", el "Ungido" , el "Cristo"
Íntimo, Interior, debe de venir dentro de cada uno
de nosotros, en nuestra alma, en nuestro corazón,
para la salvación de nuestra alma. Todo Iniciado que
encarna al Cristo o Mesías Íntimo, Interior, en su
corazón, no solamente ha de luchar por la salvación
de su Alma, sino que es también su deber, ayudar,
como un orientador a otras Almas a luchar, asimismo,
por su salvación.
Un Iniciado que encarna al Cristo
Íntimo, Interior, es un orientador, un guía, y no
quiere que se identifiquen con su persona, porque no
debemos ser seguidores de personas. Debemos de
buscar a nuestro Padre Interior y Celestial y a
nuestra Madre Divina Kundalini, y al Cristo, dentro
de nosotros mismos.
El Real Ser, El Padre, el Hijo El
Cristo, El Espíritu Santo, la Madre Divina
Kundalini, las Partes Superiores del Ser en cada Ser
Humano, son Perfectas, son "Dios".
Cuando una persona o Iniciado,
comienza a encarnarlas, siendo Perfectas, es como si
no lo fueran. Y hasta tanto el Iniciado no haya
logrado la eliminación del ciento por ciento de sus
defectos psicológicos, las Partes del Ser no podrán
expresarse con toda Su Sabiduría y Realeza, sino con
todas las limitaciones e imperfecciones de la parte
humana terrenal. Si esto es difícil para el propio
Iniciado, lo es más para las personas que esperan
que sea Perfecto. Y mas si se tiene en cuenta que la
disolución de los yoes o defectos más fuertes,
difíciles y sutiles, la tiene que realizar el
Iniciado, en trabajos esotéricos muy avanzados de la
Segunda y hasta de la Tercera Montañas. Es muy
diferente con nuestro Señor Jesús El Cristo que ya
era un Habitante del Absoluto, un Liberado, que vino
ya Perfecto, Completo, y todo lo que realizó fue
Vivir el Drama del Cristo, para dejar estas
Enseñanzas Esotéricas, como un Drama Público, para
toda la Humanidad.
Por eso el "Nacimiento en el
Pesebre", indicando la pobreza espiritual del
Iniciado cuando en su corazón nace el Cristo Íntimo,
rodeado por todos los animales del deseo y de la
mente, simbolizados por el "buey" y por el "asno" o
la "mula". Luego los "mercaderes del templo" y las
multitudes que gritan "crucifixia", son los miles de
defectos que cargamos en nuestro interior, y que Él
debe eliminar, acompañado y ayudado por la Madre
Divina Kundalini. Y aún habiendo sido depositado
dentro del Santo Sepulcro, tiene que enfrentarse de
instante en instante, en pensamientos, sentimientos
y acciones, contra los yoes más difíciles, los "yoes
de la cara oculta de la luna psicológica" en los
Infiernos de la "Luna Negra". Invitamos al amable
lector a leer sobre estos Procesos del Cristo
Íntimo, Interior, en las últimas enseñanzas de
nuestro Venerable y Amado Maestro Samael Aun Weor, y
asimismo en las enseñanzas de nuestro Venerable y
Amado Maestro Rabolú el Profeta Elías Reencarnado.
Los dos últimos Nombres que estaban
escritos en el final de aquel gran Libro titulado
"El Árbol Genealógico de la Sabiduría", que abarcaba
toda la Historia desde el Génesis hasta el
Apocalipsis, son los Nombres de "Elías y Moisés".
Nuestro Venerable y Amado Maestro
Rabolú, lo que más nos exigió y nos sigue exigiendo,
es la Muerte de nuestros defectos psicológicos, de
instante en instante, de momento en momento, que es
realmente lo único que nos sirve en este Camino,
como así nos lo dijo nuestro Venerable y Amado
Maestro Rabolú en una Carta que nos escribió al
Brasil:
"Luis Palacio
Acosta
Feira de Santana, Brasil"
"Paz Inverencial!"
"Está viendo
usted o le están mostrando lo difícil que es el Camino Directo, pero es
el único que verdaderamente nos sirve. Ahí pasa
uno miles de pruebas y miles de calamidades, pero
hay que tener voluntad de acero para seguir uno
adelante, no darse por vencido."
"Tiene que
trabajar mucho con la muerte. No olvide
este consejo, que lo único que le sirve a uno en
este Camino, es la muerte." (Carta "461", con fecha del "29
de marzo de 1995").
Amamos a todos los
Seres, a toda la Humanidad.
Cada Ser Humano es también la Humanidad.